En este sentido, existen innumerables casos en donde los tribunales reconocen esta responsabilidad cuando los profesionales sanitarios se apartan de los estándares médicos exigibles (por acción u omisión). Veamos una serie de ellos:
- Retraso o error en el diagnóstico de un paciente.
- No seguir unos determinados protocolos.
- Ofrecer una prescripción inadecuada de medicamentos.
- Realizar una intervención quirúrgica con resultados lesivos para el paciente.
- Contagio de una infección grave a causa de una falta de higiene en el centro hospitalario.
- Olvido de material quirúrgico en el interior de un paciente.
- No prestar asistencia sanitaria de urgencia.
- Falta de supervisión postoperatoria.
Si se produce una mala praxis o negligencia médica usted debe tener muy presente que cualquier documentación médica puede serle de mucha ayuda ante una reclamación posterior, por esta razón ha de solicitar una copia de todo documento médico que se haya llevado a cabo en el seguimiento de su caso.